Una obra que marca un nuevo capítulo para Santo Tomé
Comenzó la instalación de la nueva red de agua potable de 110 mm de diámetro en las calles Pont Verges y Munilla,
una intervención estructural que beneficiará a más de 50 familias de la zona.
Se trata de un avance fundamental para garantizar un servicio esencial en un sector donde esta mejora era prioritaria y largamente esperada.
Esta iniciativa forma parte de un plan de obras que la gestión municipal viene desarrollando a lo largo de todo su mandato,
con el objetivo de fortalecer los servicios básicos y mejorar la calidad de vida de los vecinos.
Obras similares se ejecutan en otros barrios y zonas, como la Primera Sección Chacra,
lo que refleja una política sostenida de expansión de infraestructura esencial.
En este caso, se trata de una zona alejada del centro,
donde la demanda por un servicio tan básico y vital como el agua potable era muy alta.
Los vecinos esperaban con gran expectativa la llegada de esta mejora que hoy comienza a hacerse realidad.
Desde el Municipio se destacó y agradeció el trabajo del personal de obras públicas,
la colaboración de la empresa Aguas de Corrientes, y la predisposición de los vecinos, quienes comprenden que, si bien las tareas pueden generar algunas molestias momentáneas,
el beneficio final es significativo para toda la comunidad.
Porque no es solo una obra:
es una respuesta concreta a una necesidad real, fruto de la planificación, la decisión
y el compromiso de seguir impulsando transformaciones que perduran en el tiempo,
llegando a cada barrio con mejoras que marcan un antes y un después en Santo Tomé.